
El otro hermano estaba consternado y triste. Aún no había superado el duelo y el día de su cumpleaños, que también era el día del cumpleaños de su hermano muerto así como el aniversario de su atropello, el hermano cruzó casualmente la misma acera y fue atropellado por el mismo taxista y murió también.
Esta extraña historia, que parece el argumento de una película de ficción es real y ha ocurrido. ¿Quizá sea la muestra de que las casualidades no existen?
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